19 de marzo de 2011

Japón

Los acontecimientos abruman la vista, resaltan las emociones y despiertan diferentes expresiones de solidaridad y consideraciones con el hermano país del Japón. Uno quisiera entender el por qué de tremenda fatalidad. Algunos hablan de la ira de Dios, que por sobre el hombro nos da varias palmadas, y otros, los más terrenales miramos en la furia de la naturaleza algunas explicaciones. Japón decidió en algún momento de su historia tener los mayores crecimientos económicos y tecnológicos, cegándose, en muchos casos, a la conciliación que debía tener con la naturaleza. Quiso imitar a occidente y puso el 32% de su consumo de energía en manos de centrales nucleares. Y se compró la teoría de que el planeta depredado no pasa factura. ¿Y ahora? Este país hermano, llora y sufre su olvido. ¿Lo merecieron? No, para nada, se podría decir que ninguna muerte es justificada y menos el dolor que tienen ahora nuestros hermanos japoneses, pero la naturaleza arbitrariamente escogió a Japón para descargar su ira y nos demostró que aunque siendo el Japón el país más preparado para resistir los embates de la naturaleza, no pudo hacer nada ante su furia. Y la tecnología que era parte de su nuevo orgullo (post guerra) se convertía en su peor condena. El mundo llora la tragedia, pero mira con miedo lo que puede pasar ahora con los reactores nucleares. Akio Komori, director de una de ellas llora por la impotencia (no puede sacar a todos sus trabajadores porque ellos tienen que luchar para evitar una mayor tragedia) Y el primer ministro nipón Naoto Kan expresa la fatalidad en la que están, mandándoles un mensaje a todos los que están en el reactor nuclear. -El abandono es imposible, sigan hasta que la exposición de la radiactividad los mate- Qué nos puede generar esas palabras, a estos hombres los llaman los hombres anónimos y la mayoría son mayores de 60 son una generación con arraigo ancestral y orgullosos se quedan como símbolo del Yamato Damasshi (Espíritu japonés). Pero ¿es justificable? ¿La muerte es justificable en algún momento? La pregunta lejana ya, a la fatalidad del terremoto, es… Se tenía que llegar a esto para abrir los ojos. El modo de producción consumista y depredador tenía rivales. Lloras ahora tú viendo los videos y en los andes lloran los nevados deshelándose, los animales no entienden este calentamiento global. Nuestro mundo se confunde a las bellezas de nuestras cifras que nos arrojan las cuentas nacionales. A quienes queremos imitar y con ellos a quienes estamos olvidando. Un abrazo a todos, el mundo hoy llora por todos lados y por todos los motivos que nos llevaron a estos resultados.


1 comentario:

Cecilia dijo...

OH ALE!!!!
DESPUES DE TIEMPO SE ANIMO A ESCRIBIR
MUY BUENO EL ESCRITO!!
FELICITACIONES