26 de febrero de 2010

Lágrimas

Me duelen tus arrugas
A veces
Cuando el tiempo juega conmigo
A carreras de tortuga

Me duele tu adiós
Siempre
Y todo lo de ayer no cuenta
El verdadero amor se va contigo.

Me duele tu silencio
Y el mío
Las distancias que te invento
Para huir sin ti.

Me duele tu amor
Familia
Si no se suicidara nuestro futuro
Si no le ganasen las lagrimas a mi corazón.

24 de febrero de 2010

Una parte de un cuento

Tú estas sentada, miras el reloj y sientes el golpe que va marcando con el pasar del tiempo. Sabes que no puedes fingir y que no quieres evitar lo que sucede atrás, tienes noción de los aconteceres, es más, participaste en el repaso, fuiste firme cuando los miraste a los ojos repitiendo estar segura de todo y les exigiste actuar con cierto cuidado y con la misma firmeza la miraste a tu madre y le diste aquel beso de judas que más luego te iba a sentenciar. Ahora miras el reloj que va avanzando y atrás continúan avanzando los desconocidos, tú tienes un crucifijo donde pides, no el perdón, sino que guíen el alma que va yendo, porque sabes que no es cuestión de falta de amor, si no de entender mejor las cosas. Ahora suena el televisor que usaste como distracción, aumentaste el volumen para no tener que escuchar ese suplicio, aunque sabías que más era un sacrificio preferiste evitar la suspicacia de la conciencia. De seguro que esto luego será tu condena, pero tú prefieres mirar ese vaso de manera más positiva, y ponerte en el mejor de los casos, donde nadie se dará cuenta que hubo algo que gesto esa noche, mientras atrás se oye un grito que exige tu presencia. Ahora el celular suena, alguien llama, dice que todo acabo y un silencio te reclama mientras tú, totalmente calmada vas visualizando tu futuro sin lo matices de lo negativo, no sientes que amas menos, todo lo contrario esto un sacrificio que hace ella para ti, es así como demuestra cuanto es que te esta amando, tú meditas, miras al cielo, le agradeces la corona te que queda como herencia y ahora en plena noche de los aconteceres, mientras otros se dan besos de buenas noches, tú le lloras junto a tus cercanos y eres partícipe del acto fúnebre hasta el momento que vayas a la cama y la expresión de tu rostro vaya cambiando, ¿qué es lo que se ve en plena oscuridad de tu alcoba? ¿no es acaso una sonrisa? niña traviesa, das la gracias en tu rezo por tanta dicha permitida y entre los últimos pedidos para el cielo pides que cuide esa alma que le envías.

Nota: Este escrito pertenece a un cuento mayor que va agarrando forma con el pasar de las líneas, ya se verá como termina.

20 de febrero de 2010

Más de doscientas mentiras

Uno inventa siempre la misma mentira
Del mal amor acostumbrado
De la noche lunera lunada
De los viajes sin retorno hacia la nada

Uno cuenta siempre la misma mentira
Incluso, a veces, inventadas
Con las manos amarradas
Desde el punto hasta la coma.

Uno copia siempre la misma mentira
El sombrero y el estilo
Las malditas madrugadas
Los quitapenas que dejan resaca.

Uno vive siempre la misma mentira
Del falso suicidio y las lagrimas de verdad
Mientras las rosas solo dan espinas
Y ya suman más de doscientas mentiras.

8 de febrero de 2010

Tardanza una vez más

(Parte 3 de 3. Inicia en "Respiros y Olvidos" y continúa en "Carta, si aún se puede llamar así")

Bueno viejo amigo me ha llegado tu carta, me alegra saber que sigues vivo, aunque siempre tuviste una falsa tendencia al suicidio recuerdo que tu verdadera tendencia era al drama, confieso que me causa gracia este recuerdo y admiración recordarla, te escribo porque me entero de tu libro, estuvo muy bueno, aunque todavía no lo termino, porque los ojos se cansan muy rápido, si de joven gustaba mucho del sueño, ahora de viejo no es la excepción, prometo terminarla antes que acabe el año, me alegra saber que te has animado y dejaste la pataleta de ya no querer escribir por la ceguera, algo me dice que si voy todo esto termina siendo una pereza de abrir los ojos, pura legaña vieja, esos tu dramas, pero igual no te reprocho, porque como ha ido la vida creo que yo también quisiera ser ciego, sospecho que ahora miras lo que quiere tu mente y podrás vivir más en tus creaciones, creo que al final terminaras metiéndote de a pocos en tu último cuento que su final terminará siendo con el tuyo.

Viejo amigo, recuerdo el día que te fuiste y entre envidia sana te dije mal parido que dios te acompañe en el viaje, esta demás decir que soy ateo y que las bendiciones tenían otras intenciones, pero igual sabes que te estimo, aún eres mi menor y no sé porque te haces más viejo, una vez más se agradece el saludo y que me hayas devuelto el recuerdo de un amigo, yo no deje mi Perú querido, aunque muchas veces me largue de acá sabía que acá me tenía que quedar, te agradezco los buenos recibiemientos en esa ciudad hermosa, lástima que ya no pueda darme otro viaje, ya la piernas no aguantan mucho trajín, y el corazón no esta para cambio de climas, saludos a la mujer desconocida ¿será tan parecida a abril? vez que tampoco la olvido, que será de ella y cuanto de los recuerdos serán reales y cuanto invento puro de los escritos

Sospecho que te sorprenderá recibir esta carta el 30 de enero, de viejo quise corregirme y ser por primera vez puntual, mis nietos, me dijeron que aproveche la tecnología y me pusieron en la agenda electrónica un aviso que me recuerde que debía escribir, un plan contra el olvido, que con los años se hace más jodido. Ya sabes, que aunque siempre llegué tarde a todas tus actividades, inclusive tu primer matrimonio y el bautizo de mi ahijado, tú viejo amigo creo que aprendiste a entenderlas, y a no molestarte con eso. Así que en agradecimiento quise hacer un excepción a pesar que tengo los años en contra. Espero viejo amigo que tengas más dicha en este año y en estos días empiezo a escribir el prólogo que te prometí, te mando un libro del Gabo de regalo y unas canciones del gran Sabina, me ha costado encontrarlas ya no venden esta música, pero Joaquín hizo de todo para encontrarlas, sospecho que te gustará, ya las manos no responden bien así que me tendré que ir despidiéndome, un abrazo en lejanía desde Lima se despide quizás por hoy quizás para siempre tu viejo amigo Alejandro.

Nota: Señor le enviamos esta carta que encontramos en la carpeta de mi padre en realidad son tres partes escritas en diferentes tiempos, pero la última parte fue del 30 de enero, ese día le dio un pequeño infarto y estuvo en el hospital que lo llevo varios días ahora ya esta descansando murió un febrero insoportable, pero como siempre quiso; en cama y durmiendo. Me apena la tardanza del envío sospecho que al final él también lo quiso así, digo para no perder la costumbre. Se despide sabiendo que usted fue un gran amigo de mi padre.
Joaquín Sicchar.

6 de febrero de 2010

Discurso de Arena

A todos ustedes

Queridos amigos graduados, en esta su noche vengo a molestarlos con palabras graves que otros ya proclamaron, con citas respetables que nunca recuerdo citar, con uno de mis más recurrentes temas para el insomnio. Queridos amigos, desde mi posición de observador hoy los despido con nostalgia, y espero que el camino no les cambie tanto esa mirada que ahora esconden cuando me dan la espalda y se abren paso hacia la calle, con ganas de devorarse un mundo que nunca llegaron a entender.

Amigos míos, hoy los veo adelantarse, sacar ventajas, les encargo mucho este país, se que también es de ustedes, pero a veces uno se olvida de esas cosas, les encargo que lo miren muy de cerca, si es posible desde abajo, desde el lado más temible de la estadística, desde ese perfil horrendo que queremos tapar. Les encargo mucho la esperanza de mis padres, la de los suyos también, la esperanza de una nueva generación de economistas deseosa de remontar el marcador, con la fuerza que le falta a los viejos sabios, con miles de teorías en la cabeza, con borradores de proyectos en los bolsillos, con ganas de ordenar de una vez por todas el sistema. Queridos amigos, les encargo el futuro de mis hijos, el de los nuestros, cuiden del rompecabezas que les heredaremos, no se los demos muy desordenado, pongamos las pautas, avancemos lo que se pueda, que no nos reclamen nuestro egoísmo, que no se tengan que matar unos a otros por lo mismo.

No se olviden de la jaula dorada que ahora se abre de par en par para que vuelen libres en busca de tiempos mejores, no se olviden de los años de naufragio en San Marcos, no se olviden de la sociedad que nios encierra, destinados están a ser huéspedes de las torres de marfil que me rodean, abran una ventana 2 veces por semana, échenle una mirada a los primeros pisos, a los sótanos, en ustedes esta la solución a algún problema. No se burlen de la imaginación, abusen de ideas ingenuas, ríanse con la nada, aprendan con los niños, quizás algo se nos ha escapado en esta carrera de ser humano.

Hay, hermanos, muchísimo que hacer, y algo peor que una persona indiferente, es un economista indiferente, ustedes son los llamados para curar las dolencias de la Patria, ustedes son los iniciados en esa magia oculta que mueve los hilos detrás del escenario, terminen la maqueta de una mejor nación, no busquen llenarnos de dinero, regálennos calidad de vida.

Queridos amigos graduados, esta noche no es la mía* y me temó no podré acompañarlos, solo verlos con nostalgia, esperar que se tracen un buen camino, quién sabe, quizás más tarde nos encontramos.

*Para mayor sentimentalismo continuar la lectura en "Despedidas", de lo contrario, obviar esta nota cursi.