29 de mayo de 2009

Para ser de noche

Para que sea de noche, hay que invocar una brisa fría, húmeda, sepulcral. Hay que oxidar los barrotes de las jaulas, pintar fuera de las líneas, romper cristales, olvidar al reloj y su tictac. Para que la luz no se encienda en tus pupilas, hay que verse tres veces al espejo, no reconocerse en ninguna, hay que verse más viejo, más cansado, más gato, hay que pasar por todos los mares, volar en halcones, bailar desnudos. Hay que remedar novedades, derribar castillos, no escatimar en escalofríos, no hay que permitir vanidades. Para que oscurezca bien, para que pase, hay que rezar nuevas oraciones, beber los mismos licores, duplicarle la apuesta a la prescripción, buscar escaleras de caracol, balcones griegos, pétalos de sal. Hay que dejar pasar a la melancolía, meterse en la neblina, buscar pretextos para la tristeza, volverse inmune al cigarrillo, preferir el olvido, encontrar rincones escondidos, tejer telarañas, matar rayitos de esperanza. Para que sea, para ser de noche, hay que coleccionar lagrimas de plata, hay que perderse, hay que robarse el oro de los tigres, deshojar estrellas; y si la luna falla, es cuestión de correr un poco la persiana.

22 de mayo de 2009

Querido Genio

Yo quisiera bañar de rojo los calendarios, dinamitar los lunes húmedos, multiplicar los sábados y los feriados, caer de a pocos porque tengo espacio. Yo quisiera respirar un poco de libertad, comprobar que el sol también existe, que hay mundo fuera de esta oficina, que la vida es más que ver pasar a la gente por el cristal. Yo quisiera un mejor amigo que este computador, o por lo menos alguien más entendible, quisiera andar descalzo por el asfalto, inventar pasos en la acera, salir del ciclo del despertador, dormir más porque no hay escuelas.

Yo quisiera vacaciones de verano, cierres de estación, primavera todo el año, con viajes y sin presión. Yo quisiera un poco menos de recibos, disminuir tarifas, deshacer corbatas, volver a mi blue Jean, sacar a las muchachas con propinas de papá. Yo quisiera desaprender el código de adulto, huir del restauran sin pagar, amarrarme el cabello, bañarme a las tres. Yo quisiera volver a mi imaginación, resucitar a la rebeldía, no caer nunca del árbol, quedarme en la madurez de Peter Pan; yo quisiera, querido genio, tener 17 unos cinco años más.

14 de mayo de 2009

Nosocomio

Si no creyera en lo que observo, si yo no viera tanto de esto, si todo fuera no más que un sueño y no quedaran esos recuerdos. Si yo tuviera en el pensamiento las cosas sublimes que da la vida, si algunas historias no fueran ciertas y otros cuentos si fueran buenos. Si ya tu imagen no repitiera esos retratos que ya no busco, si se pudiera ser más urgente con las desgracias de estos días, si esos llantos que aun se escuchan no estuvieran en la otra esquina, si los enfermos no tuvieran prisa y sus dolores no griten por ellos, si sus condenas no fueran esas y haya más alivio en sus rutinas, si no te viera con esa queja y no la viera también a ella, si no escondiera ya la tristeza y todos ellos no la compartiera con aquel que mira con el mismo asombro y el dolor del primer día. Si esos colores no fueran fríos y ese frío no sea la vida, si ya todo tuviera un brillo que indicara cuando es la partida, si los dolores se compartieran así menguaran tanto quejido si yo pudiera cambiar historias y las historias no me cambiaran los días, que tanto hubiera de esa dicha y cuanto tiempo disfrutaría, si este edificio en algún momento no se convierte en el hogar del despido, que no me dejen en las urgencias, que no los dejen a los que quejan. Si tanto de esto no se repitiera, ya hay dolores que son cercanos y los ajenos igual conviven con quien se acerque y quien los mire. Si todo fuera ya más tranquilo y estas líneas se hicieran ciertas, se permitiría el gran respiro y despediría mejor la vida.

Unete

Y ahora se escucha el grito cercano, se hace arenga a la victoria y se mira al derrotado, ahora su altanería se somete al piso, disimulan la agonía y solo lloran los pecados, ahora saltamos entre abrazos, felicitamos el trabajo y nos miramos soñando el ojala. Ya todo tiene el resultado, las bases han hablado y yo me pierdo en nuevos días que se dan, ahora los tiempos nuevos se te muestran, aún así no me escapo, igual hay un mismo mundo; la cultura y la literatura no dejaran que uno ande solo es cuestión de nuevos vientos, experiencias que se hacen nuevas, ahora llueve un quizás ya vendrán las nuevas lineas que se mezclen en este tiempo que se hacen diferentes, pero no ajenos. Es cuestión de volver a respirar.

Se ve en los cercanos ese respiro, hay quienes conocen de este espacio necesitado y los que no, entre los que me mezclo yo, igual se crea un grupo nuevo, obreros trabajando, empujando un mismo carro en busca de ese colectivo que aplaste nuestro egoísmo, el tiempo dirá si somos enemigos o aliados de nuevos brillos, sin la indiferencia al mundo que nos rodea, con carácter siempre crítico y la mano del amigo.

Y ahora que las líneas se escapan de su camino, busco la vía que conduce este tranvía literario que nos lleve siempre a ese descanso permanente, a ese desahogo de ideas, donde somos complices de historias, de invitaciones al pensamiento, de los sueños ya inventados sin los calcos mal copiados, de las creaciones más Humanas.

10 de mayo de 2009

Adiós

Ahora que ya te has ido y ella ha recogido mis versos de tu bolsillo, que los junta con cariño, que los cambia a su gusto. Ahora que de espaldas a la noche la casa se ha quedado vacía, la cama fría, que he asaltado el bar; ahora que juraste un eterno olvido, superlativo, artificial, que juraste tus reproches, que perdiste la conciencia, que lanzaste los retratos por la ventana, que estrellaste tus celos contra la verdad, que te vas y que ella viene, que tu adiós parece seguro, tus pasos débiles.

Ahora que no dices recordar nada, que tus memorias se las llevo el río, que la luz se extingue en el comedor, que el frío toma puesto en el balcón, que sus manos nuevas me toman, que sus piernas me reciben confiadas, que me reclama su breve cintura, que sus ojos lloran por ti, que sus labios juegan a darme amor, que su cuerpo me reconoce, que sus hombros se desnudan, que su espalda borra tus huellas de las sabanas, que su alma se confiesa a mis pies. Ahora que la amo tanto, ahora que te dimos la razón, ahora que me abraza dormida, ahora que me diste nuestro penúltimo adiós.

3 de mayo de 2009

Por la esquina

Por la esquina pasan sus pies, sus sandalias de ayer, sus pantorrillas suaves, su blusa, su actitud desafiante, su cabello recogido, sus males de amor. En la acera se pregunta los reproches, en la banca se coloca para ver mejor una nube, por sus gafas rojas pasa más bella la luna, por sus ojos limpios desborda una lágrima nueva con motivos antiguos. Por la esquina pasa la rubia del tacón aguja, el homosexual que infla sus músculos, pasa el mundo muy de prisa en su traslación, pasa la vida que se le escapó de las manos, pasa la noche desenfrenada, adolescente y artificial, pasa el desempleado cansado, el oficinista suicida, el inversionista endeudado, el caduco progresista. Por la esquina pasan los perros, por el techo los gatos, pasa el sabio en banca rota, pasa el tonto en Mercedes Benz, por la esquina pasan sus flores, se le pudren las semanas, por la esquina se incendia un beso, termina una vía; por la esquina paso yo, tú dirás con que disfraz